El Colegio Sagrado Corazón de María, es una Institución Educativa con espíritu religioso y cristiano, que brinda una formación integral a los educandos. Pretende formar personas de espíritu analítico, crítico y científico, que propicie el mejoramiento de su entorno y de la sociedad. Se apoya en fundamentos científicos y de la fe en Dios, para el desarrollo integral de sus educandos, en el ámbito afectivo, cognoscitivo y psicomotriz, teniendo en cuenta siempre, el eje transversal de la Institución basado en la ética, la moral y la formación en valores de sana convivencia. El servicio a la comunidad educativa, tiene como fin lograr una formación cualitativa, religiosa, moral, ética, social, con desempeño académico, artístico, cultural y laboral, con miras a entregar personas útiles a la Iglesia Católica y a la Patria

El Colegio Sagrado Corazón de María, para el año 2025 será una Institución Educativa altamente identificada a nivel municipal y nacional; atenderá a la niñez y juventud bellanita formándola en desarrollo humano para un proyecto de vida y el aprendizaje en sociedad. Será modelo de gestión en la observancia de los fines educativos, el desarrollo de los procesos y de la investigación científica y tecnológica, sus educandos serán reconocidos moral y académicamente, preparados para la innovación, el emprendimiento, la gestión de la convivencia ciudadana y los desafíos de un mundo en constantes cambios.
En consonancia con el Plan Decenal de Educación y el Plan Decenal Municipal, la Institución para el 2025, dentro del marco del estado social y democrático de derechos, será reconocida como institución que garantiza en condiciones de equidad, el derecho a una educación de calidad desde procesos de formación integral que vinculen la cultura, los saberes, la investigación, la ciencia, la tecnología y la producción; como contribuyentes al justo desarrollo humano basado en el componente ético como eje transversal de la Institución, sostenible y solidario, con el fin de mejorar la calidad de vida de los estudiantes y alcanzar la paz, la reconciliación y la superación de la pobreza y la exclusión.

• El Colegio Sagrado Corazón de María, se fundamenta en los valores educativos de sana convivencia basándose en los principios de igualdad, solidaridad, tolerancia y pluralidad. Así mismo, nos sentimos comprometidos con el modelo de enseñanza pública que promueve la participación de todos en la gestión y en la vida del Colegio.
  El Colegio, no es sólo un espacio de transmisión sino de puesta en práctica de ciertos valores y principios básicos e imprescindibles para la convivencia, como:

• El ejercicio de la responsabilidad individual
• Respeto a las personas, sus derechos y libertades
• Tolerancia de las diferencias culturales, políticas y religiosas.
• Igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y de trato y no discriminación de las personas
• Solidaridad con aquellos que parten de una situación de desventaja, independientemente de que esta sea debida a causas personales, culturales, económicas o sociales y con atención especial a las personas con discapacidad.
• Ejercicio de la democracia en nuestra toma de decisiones

• Respeto: La exigencia del respeto, hace referencia al cuidado activo de las relaciones personales para que trabajemos en equipo con unidad de objetivos y con pluralidad de opiniones y criterios. Este respeto implica la no discriminación de ningún integrante de la comunidad educativa por motivo de sus ideas, procedencia o condición.

• Tolerancia: La actitud de tolerancia, conlleva el ejercicio de la capacidad de escuchar y sopesar otras opiniones, usar la crítica como medio de mejora y colaboración, cooperar en la realización de los proyectos educativos que puedan ponerse en práctica. Nuestras relaciones seguirán un modelo de diálogo abierto y sincero, libre y respetuoso entre las personas.

• Solidaridad: La actitud solidaria debe ser el resultado de un deseo personal y voluntario, no coactivo ni mecánico. No obstante, el Colegio como institución debe estar dispuesto a defender y a apoyar a las personas que lo necesiten.

• Diferencia : El respeto, la tolerancia, la cooperación y la solidaridad deben ser valores que desde el entorno más cercano se extiendan hasta diversidad cultural, lingüística e histórica. En este contexto, somos conscientes de que la interculturalidad es un elemento claramente enriquecedor de las personas y de la sociedad y eso debe de ser mostrado en nuestra práctica diaria.

• Participación democrática: La participación democrática, implica poner en práctica las formas y los criterios que debiéramos saber usar todos los ciudadanos y/o estudiantes para tratar de resolver pacíficamente nuestros conflictos o la mecánica para consensuar y tomar decisiones que afecten a un grupo de personas.